La Justicia es representada por una mujer con los ojos vendados, con una balanza en una mano y una espada en la otra.
La espada simboliza la ley, la que tiene que ser observada siempre.
Recordemos el diálogo de Sócrates y Criton cuando el primero es condenado a muerte. Sócrates no acepta argumentos y elige la ley sobre la posibilidad de escapar pues ella estaba por encima de todo y como buen ciudadano debía respetarla y aceptarla aunque fuera injusta.
Por ese concepto eligió la muerte a la huida. Por respeto a ella.
La balanza es sinónimo de equidad, equilibrio, del justo medio.
De la prudente apreciación de los hechos y de la prueba llevada a cabo por el magistrado conforme la lógica, el sentido común y la experiencia ganada en el ejercicio de todas las opciones que el derecho le brinda al hombre con vocación y convicciones en esa disciplina.
Los ojos vendados, de hecho implica que no es ciega. Para qué necesitaría la venda si no fuera así; pone de manifiesto la imparcialidad que debe tener el juez, su rechazo a cualquier tipo de presión, ya sea política, ideológica o de cualquier tipo.
Al respecto se ha dicho: "Desde la época romana la Justicia ha sido representada por la diosa Themis. La cual se presenta con el aspecto de una noble mujer empuñando en todo lo alto la espada de la ley; sosteniendo con la otra mano la balanza de la equidad y manteniendo siempre los ojos vendados en señal de imparcialidad. Esto es, que deja caer la fuerza de la espada sobre quien trate de desequilibrar la balanza, no viendo las particularidades del individuo, sin importar que sea joven o viejo, rico o pobre, enfermo o sano, blanco o negro, virtuoso o criminal" (Lic. Edgar Martínez Cruz, en www.tuobra.unam.mx).
Obviamente de los símbolos señalados el de mayor relevancia es el de los ojos vendados pues la imparcialidad que implica garantiza la seguridad jurídica, recaudo esencial para cualquier sociedad democrática.
Cabe reiterar que la Justicia no es ciega, simplemente tapa sus ojos para no ver a las personas involucradas, para que nada viole su objetividad; pero de ningún modo es ciega, no sólo porque de ser así la venda sería innecesaria, sino porque precisa tener los ojos bien abiertos para decidir en cada caso, distinguir sin duda la verdad de la mentira y resolver lo más adecuado en cada cuestión.
Luego de todo lo dicho no deja de sorprendeme que la representación de La Justicia que luce junto con la publicación de los antecedentes de los candidatos a los cargos vacantes del Tribunal Superior de Justicia
1 (publicitada en varias ediciones del diario Río Negro), no lleve venda en sus ojos.
(1) Se refiere a los avisos publicados en el diario Rio Negro por el Poder Judicial del Neuquen-Argentina (not. webmaster)