Luego de seis años y medio, mañana voy a asistir a una audiencia más de esta tragedia sin fin en que se convirtió el juicio por la incapacidad de mi hijo Pablo generada por violentos hijos del poder y realmente asumo el asunto con dolor, abrumado pues una vez más debo enfrentar la obstinación del poder para que los violentos queden libres como sea, aguardando que yo desista, y poniendo la relevante estructura de la defensoría oficial - que pagamos todos - al servicio de los imputados cuyas familias amigas de los amos ostentan una riqueza relevante, es una especial sección de defensor oficial de amigos.
Realmente es una absoluta vergüenza que hago pública pues esta vez le tocó a Pablo pero sucede con cualquiera que tenga la mala suerte de lidiar en tribunales con referentes del poder y una administración parcial que le niega a Pablo la justicia que reclama por la minusvalía que padece a causa de la violencia insensata e impune de los autores el hecho.
El caso ya estaba resuelto en el 2008 por una decisión de la ex Cámara en los Penal con Competencia Provincial con asiento en Neuquén que dijo con claridad quien de los imputados había pegado, cual había sido autor o partícipe pero al volver a Zapala a fijar los detalles de la participación el trámite durmió el sueño de los injustos, se perdió lo "encontraron" y finalmente el juicio por jurados que livianamente suspende la anterior audiencia porque uno de los violentos estaba de" vacaciones en Brasil."
Parece una pesadilla o una broma de mal gusto pero es la abrumadora realidad y reglas de un sistema de amigos y compromisos que pisotea las garantías del debido proceso sin ningún pudor.
Finalmente destaco que el delito cometido y probado mil veces es "Lesiones gravísimas con alevosía" y tiene una pena de hasta 15 años de prisión.
Sanción relevante sin duda, que no es nada en relación a la vida de dolor y sufrimiento que sobrelleva Pablo, más lo intentaré hasta el final, no es justo que los malos además de burlarse de la buena fe del ciudadano incapaciten a nuestros hijos y nos maltraten por pedir justicia. |