Con fecha 27/12/15 el diario Clarín on line me informa que esta madrugada tras amenazar con un arma de fuego - que por TN aseguraron que era de juguete - a los guardias, los hermanos Martín y Cristian Lanatta y Victor Schillaci condenados a prisión perpetua por el triple crimen de General Rodríguez fugaron con extrema facilidad de la cárcel de máxima seguridad de General Alvear apareciendo oportuno destacar que hasta hace unos día los evadidos tenían una doble guardia de seguridad que les fue retirada sin motivo alguno y a nadie llamó la atención

Los narcos que debían estar más resguardados en el país salieron prácticamente caminando del penal subieron a un auto viejo que los esperaba en la puerta y con el cual se llegaron a una poderosa camioneta 4x4 negra desapareciendo rápidamente del lugar.

Suponer que los mentados presos tenían algún interés en escapar del establecimiento sería una ingenuidad - sospechosa fuga dicen los medios - pues en recientes declaraciones periodísticas y ante el Tribunal de Justicia habían realizados atrevidas y comprometedoras revelaciones sobre el funcionamiento de las redes del narcotráfico en nuestra país que estaban dando lugar a investigaciones riesgosas para la paz de individuos poderosos que pudieron sin dificultad ser determinantes en la evasión.

En cualquier caso el hecho de la fuga sin inconvenientes de un penal inexpugnable marca el poder que ha adquirido el narcotráfico en la Argentina y debe ser una cuestión que ponga en alerta las alarmas, se exija a los funcionarios máxima atención, pues sea que los prófugos hayan vuelto al ruedo o acaben en un zanjón, la seguridad es una fantasía en este desafortunado país donde todos estamos a merced de traficantes asesinos, sicarios, malvivientes de todo tipo pues las cárceles son simples hospedajes transitorios