En todos los supuestos en que se requiera un ciudadano para ejercer un cargo relevante, que directa o indirectamente represente a la República Argentina, las exigencias que debe reunir para su designación deben traducir el honor, la honestidad, la transparencia en la gestión, en suma, un estadista cuyo legajo se distinga por sus acciones positivas, sin tachas ni fallas que oscurezcan su impecable trayectoria.
En nuestro país, con la aprobación de políticos y dirigentes sin criterio ni sentido común se pretende postular a candidata como Presidente de la Nación a Fernández Vda. de Kirchner que al momento cosecha más de 10 procesamientos que van desde el robo hasta la sospecha de haber intervenido en alguna forma en el crimen del Fiscal Nisman.
Si esto sucede, si la Sra. Fernández logra postularse como candidata a Presidente de la Nación, la sociedad argentina que lo permita habrá hundido al país al borde del abismo, demostrando un desprecio absoluto en la lucha contra la corrupción y seremos sin duda y por siempre la burla en el concierto de las naciones libres, democráticas, republicanas y honorables.
Seremos un pueblo sin valores, corrupto, amigo de la coima y los aprietes, sombras errantes en la soledad del desierto por siempre y sin posibilidad de revertir esta ominosa decisión. |