En el diario online infobae.com.ar de fecha 17 de agosto de 2019, se destaca que “El Financial Times dice que fue el Papa Francisco quien alentó a Alberto Fernández a reconciliarse con Cristina Kirchner. El diario británico señala que los inversores se preguntan cuál de los Fernández gobernará la Argentina, aunque destaca que el favorito para ganar la presidencia insiste en que el país no volverá al populismo extremo del pasado”.
Que lo expuesto en el párrafo anterior marca no solo la gravedad que implica la incursión del titular del Estado Vaticano en los asuntos internos de la Argentina, circunstancia que aparece inconcebible en atención al hecho que tanto la Vda Kirchner como su hijo Máximo han puesto de manifiesto que el plan económico que se introducirá en caso de ganar las próximas elecciones será sustancialmente inclumplir con las obligaciones contraídas con el FMI, dejando de pagar las deudas con el ente internacional precitado en su totalidad.
Lo expresado tiene fundamento en los propios dichos de la candidata a vicepresidente del país y en las expresiones de su vástago puestas de manifiesto en varios medios y en distintas ocasiones.
De lo narrado podemos concluir sin mayor dificultad que quien va a ejercer el poder en la Nación Argentina en el supuesto que gane las elecciones nacionales y provinciales la fracción política Frente de Todos, será Cristina Fernández, sus hijos, particularmente Máximo Kirchner y La Campora que actuará sosteniendo la ideología comunista más dura y con ello se logrará el objetivo de eliminar la democracia republicana como forma de gobierno y reemplazarla por un régimen absolutista y tiránico, eliminando la propiedad privada, los derechos individuales esenciales como la libertad y la libre expresión de las ideas, además de la división de poderes a imagen y semejanza de lo que ocurre en Cuba y Venezuela.
Así en caso de repetirse en las elecciones de octubre el resultado de las Paso las instituciones que hoy nos rigen desaparecerán, perderán su vigencia en manos de un régimen despótico e izquierdista que no dudará en aplicar las medidas que sean menester para conseguir el objetivo planeado.
En verdad este infortunio era previsible si apreciamos que la Sra. Cristina Fernández luce en su prontuario 13 procesamientos por delitos gravísimos, 7 pedidos de prisión preventiva y tres reclamos de desafuero no obstante lo cual fue aceptada sin más para integrar la lista de candidatos para participar en el proceso electoral argentino en tanto el objetivo real de la actual senadora no es otro que en su momento el Sr. Alberto Fernández designado por ella misma como candidato a presidente la indulte en todos los delitos por los cuales es juzgada apurando los trámites a ese fin y que el mandatario por ella elegido decrete la libertad de todos los funcionarios de régimen ejercido por Cristina Fernández y su extinto esposo.
En razón de que lo dicho sería la muerte de la Argentina como Nación democrática y republicana, atendiendo a que los pueblos no se suicidan, se impone una reflexión en los electores que provoque un cambio abrupto al tiempo del voto desechando la fórmula kirchnerista y demás candidatos a distintos cargos de manera integral e indudable para evitar que se vuelva a producir la debacle del lunes negro que se transformaría en el apocalipsis fatal, terminal y sin salida. |