Las próximas elecciones son de extrema relevancia pues en el acto electoral se juega el destino de la nación, esto es, si volveremos a ser una democracia representativa y republicana o si nos convertimos en una dictadura totalitaria.

En tal sentido se ha dicho «Lo dijo en las últimas horas Waldo Wolf pero también lo habría sugerido antes el presidente del bloque de Juntos por el Cambio, Mario Negri “estamos a 7 diputados de ser Venezuela”» (www.clarin.com.ar/politica)

Así si Juntos por el Cambio no se pone de acuerdo sobre los principales candidatos y acaba en una interna salvaje el Frente de Todos podrá obtener fácilmente los votos suficientes para imponer la ley que se le venga en gana.

Con fecha 20/06/21 Mario Negri afirmó: «La oposición debe dejar de pelearse por el 2023 porque es la elección de este año en la que se juega el equilibrio de poder». «Si el gobierno está desordenado la oposición debe estar ordenada. La sociedad nos reclama estar unidos para que el país tenga futuro, destacó».

No hay duda de que lo expuesto precedentemente es cierto pero debe existir un elector extraordinario y experimentado que resuelva en los casos de conflicto.

No es un capricho totalitario sino una manera formal y rápida de acabar con la pugna y por ello propongo que, siendo Mauricio Macri, el único que ha tenido una importante experiencia presidencial, sea quien decida inapelablemente cuando medie un conflicto por una candidatura.