El 22/06 en el marco de la conmemoración del año nuevo mapuche, la agrupación «Kizu Iñciñ» convocó a izar la bandera mapuche en las distintas sedes que la UNC tiene repartidas en las provincias de Río Negro y Neuquén, con la intención de consagrar la soberanía político cultural de la nación mapuche.

El Auditor General de la Nación, Miguel Ángel Pichetto, sobre el punto dijo «Será un acto en el que se intenta demostrar la soberanía del pueblo mapuche, una demostración de desconocimiento a la patria. De místico y espiritual cero. Todo político»

Es inadmisible que ello suceda como lo pretende la agrupación mapuche pues la soberanía significa independencia, es decir, un poder con competencia total con fundamento en la Constitución Nacional argentina que es la base principal del ordenamiento jurídico y por ello no puede ser contrariado por la nación mapuche que obviamente no puede ejercer el poder soberano de Argentina en ningún ámbito de nuestro país.

La bandera celeste y blanca no puede ser reemplazada en ningún evento por la de cualquier pueblo extranjero, ello sería abdicar de la soberanía argentina, la cual es absoluta, perpetua, indivisible, inalienable e imprescriptible, y por ello cualquier acto que intente avasallarla debe evitarse so pena de aplicar sanciones severas en caso de incumplimiento.

La soberanía es una sola y se fundamenta en la CN y no puede coexistir jamás con la pretensión del pueblo mapuche que intenta desconocerla.