Desde la cárcel Marcela Acuña, madre de César Sena, pregunta ¿Por qué si su hijo César es el responsable de la muerte de Cecilia Strzyzowski se los incrimina a ella y a su marido Emerenciano Sena? 

En verdad creo que desde esa pregunta primaria hasta el fin de su carta expone una serie de circunstancias que provocan que ellos Emerenciano y Acuña estén presos siendo absolutamente inocentes ya que como se dijo el culpable no es otro más que su hijo. 

Sucede -según Acuña- que lo que pretenden con esta decisión sin fundamento es atacar a Emerenciano y a Capitanich en un escenario electoral indudablemente influenciados por los grupos económicos que, según Acuña, manejan los grandes medios y prenderse a los desmanes del falso periodismo. 

Marcela Acuña afirma que a lo dicho debe sumarse “la ideología de los dictadores militares, portales truchos que siempre en nombre de la patria anhelan matar de alguna manera a nosotros ‘los rojos’, se trata de ser una condena social por ser mamá y papá de César, por ser piqueteros, por ser socialistas, por haber levantado la bandera cubana con la argentina, por amar a un caudillo rojo (Emerenciano) por haber hecho Emerenciano más de 400 casas y estamentos públicos sin empresas; por haber creado bibliotecas, centros de recreación y tanto más”. 

Sostiene que “todo esto nos hace culpables, clan mafioso para la justicia y para aquellos oportunistas que creen que van a volver a gobernar la provincia y que el encierro a Emerenciano y la exposición pública van a ganar y gobernar”. 

Resumen de la carta escrita en la cárcel por Marcela Acuña donde se pone de manifiesto que la madre de César culpa como responsable de la tragedia de Cecilia, a su hijo y a todos aquellos que no son rojos, que no veneran a Cuba, Venezuela, el “Che” Guevara Lynch y al gobernador Capitanich.