En Argentina la victoria de Javier Milei en las PASO y el pensamiento y la palabra del vencedor quien afirmó “yo considero al Estado como un enemigo, los impuestos son una remora de la esclavitud”, declarándose “libertario” y “anarcocapitalista”, prometiendo que de ganar en las elecciones dinamitará el Banco Central, reducirá el nro de ministerios y legalizará el porte de armas de fuego, es una expresión preocupante.

Además, debe tenerse en cuenta que los anarcocapitalistas tienen como fin liquidar al Estado, privilegiando la libertad por encima del orden obviando que si desaparece el Estado solo nos espera caos y violencia, haciendo realidad la ley del más fuerte, cualquiera puede matarte, invadir tu casa, en suma, hacer todo aquello que se le venga en ganas ante la falta de un control que lo impida. Agregando que los más débiles resultarían los más perjudicados y que la libertad sola, sin orden, termina siendo negativa para ella misma y si bien los regímenes libertarios son atractivos para electorados desencantados con los políticos tradicionales, entregarles el poder a los seguidores de esa corriente política corre el riesgo de llevar a los ciudadanos a vivir en el desorden y la anarquía culminando en un sistema tiránico (ver www.bbc.com nota de Juan Francisco Alonso, 29/08/23, “Todo en exceso es malo”)

Lo expuesto es un alerta a los electores al tiempo de decidir quién será presidente de la Nación y evitar que la decisión que al final resulte sea altamente perjudicial para la pretensión de consagrar el bienestar general, como lo impone la Constitución Nacional.