Los argentinos acuden cada miércoles a la Plaza de Mayo reclamando un aumento de sueldo en favor de los jubilados como reclamo esencial, al que se suma igual petición en beneficio de los médicos del Hospital Garrahan, mayor retribución para los docentes de las universidades, puestos de trabajo en toda la actividad económica, financiados con subsidios del Estado, incrementos sustanciales en todas las ramas de la educación esto es primaria, secundaria y universitarias, viviendas dignas, y múltiples de otras solicitudes que se claman de manera violenta con enfrentamientos que involucra a la policía de la ciudad de Buenos Aires, Policía Federal, prefectura, gendarmería utilizando camiones hidrantes, gas pimienta, baldosas, ladrillos generándose un caos con heridos varios, vidrieras rotas, y el cierre de comercios con el resultado obvio de toda una jornada donde el trabajo se frustró y los reclamos de los manifestantes acabaron en el cesto de papeles.

Lo expuesto sucede cada miércoles, todo los miércoles advirtiendo que los jubilados y trabajadores son cada vez menos y las organizaciones de izquierda, los cartelones con la imagen del Che Guevara, las banderas de Palestina, los militantes que amenazan con la destitución del Sr. Presidente Milei atribuyéndole el hambre del pueblo aumentan, todo ello sin una sola queja respecto de los que convirtieron un país rico, en otro en que la pobreza está presente en cada rincón de esta nación desafortunada, de provincias donde las enfermedades, la ausencia de educación, el desinterés de los políticos hoy reinan con un destino de nada.

Un ejemplo de esto es la provincia de Salta (Santa Victoria del Este) donde el programa «Hambre de Futuro» destaca desnutrición en la provincia «“El paraíso de la desidia”: los niños pelean contra el hambre y la deshidratación» la oposición está acorralando al gobierno nacional, tal como hemos dicho los reclamos son diversos y exceden el límite de lo razonable al punto que el presidente sostuvo en su discurso del 8 de agosto que lo quieren derrocar, que no hay plata para pagar los variados reclamos, que deberán sacarlo con los pies para delante, que no se volverá atrás, a la inflación, a la emisión de dinero sin sustento, en suma se sugiere una pizca de prudencia para no perder el resultado del esfuerzo realizado por pueblo y gobierno hasta el presente.

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