El primer paso para salir de esta difícil encrucijada en que se encuentra el país es comenzar de inmediato a erradicar todas y cada una de la bandas narcos instaladas en el país que se han instalado con el visto bueno de los tres Poderes del Estado pero sustancialmente del Poder Ejecutivo que incluso ha otorgado a muchos de los narcotraficantes de mayor relevancia y a sus familias residencia legal en la Argentina.
Así es de público y notorio conocimiento su presencia en las zonas más caras de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y de la provincia de Buenos Aires como Puerto Madero y Nordelta donde poseen lujosas mansiones y departamentos de alta gama, sus niños van a los mejores colegios de la zona y paulatinamente con la complicidad de las autoridades argentinos, de funcionarios, políticos con aspiraciones en las próximas elecciones van consolidando su presencia en cada rincón de nuestra desafortunada Patria.
Es absolutamente necesario erradicar el narcotráfico antes que su crecimiento invada los tres poderes del Estado y en definitiva se constituyan, por testaferros pagos y traidores, en el verdadero gobierno de la nación y la argentina Patria se convierta absolutamente en un país narco.
No es ninguna exageración sabido es el amplio dominio que han alcanzado las bandas narcotraficantes en todo el norte argentino, la triple frontera, provincia de Buenos Aires, la CABA, Santa Fe, Córdoba etç., y así la droga se extiende con el poder del dinero como un cáncer maligno desde las villas y tomas, donde se transforma en principal ingreso de niños que comienzan a vender y consumir paco a los 8 años, a los 14 matan y a los 20 mueren, siendo factor determinante de la deserción escolar, ya que si bien el 99,7% de las madres llevan a sus niños a iniciar la escuela primaria sólo entre el 15 y 20 % terminan la secundaria y no habiendo trabajo la venta al menudeo de droga se convierte en el ingreso de niños y familias excluídas, marginadas, pobres.
Por ello el discurso presidencial indica en realidad que la base de la creciente pandemia de homicidios y linchamientos es la exclusión social y que la mal llamada década ganada ha sido el período mas desgraciado del país donde la miseria, la droga, la trata, la violencia infinita se hicieron amarga realidad pegando con especial intensidad en las clases más pobres que nunca fueron incluídas.
Esta tarea no se enfrentará seriamente en este momento, pues los avales y compromisos subsistirán, será obra del próximo gobierno siempre que los 2/3 de los legisladores que integran el actual Congreso -sin cuya condescendencia los narcos no hubieran podido instalarse-, sean reemplazados por políticos nuevos con propuestas distintas, superadoras que enfrenten la dura lucha contra narcos, y malandras de toda laya con convicción sin peros ni condiciones.
Es la última oportunidad, o los narcos y bandas criminales de todo tipo son abatidas por un gobierno con valores y determinación o la Nación Argentina dejará de ser. |