Hasta el comienzo de la última década el narcotráfico era un flagelo que no figuraba como factor de preocupación relevante en la sociedad, era una desgracia de otros que a lo sumo se comentaba por argentinos desprevenidos, confiados como siempre, que la tragedia de la droga jamás nos alcanzaría, que gobernantes probos adoptarían las medidas necesarias para impedir que el narcotráfico accediera a esta tierra de paz, pan y trabajo, que aquellos que nos prometían la seguridad y bienestar general harían prolija y rigurosamente su trabajo en este punto, que podíamos dormir tranquilos, que este pueblo no padecería la pesadilla del tráfico, producción y consumo de estupefacientes.
Nos equivocamos, como suele ocurrir, las promesas políticas que nos decían de impedir la mínima posibilidad que los narcos pisaran tierra argentina se esfumó rápidamente y hoy en este magno suelo se produce, consume y trafica droga de todo tipo, se abrieron las puertas de par en par para que el narcotráfico y su secuela de muerte e inseguridad encontrara refugio seguro para expandirse de todas la manera imaginables, desarrollándose con impunidad y complicidad de autoridades corruptas, en cada rincón del país siendo el sustento esencial de la inseguridad que se encuentra al tope de las inquietudes de la población.
Tan grave es el problema que con fecha 26/08/2014 cuatro academias nacionales organizarán una jornada sobre drogadicción en el Aula Magna de la Academia Nacional de Medicina con el objetivo de consensuar políticas para combatir el narcotráfico y el consumo de drogas, un alerta por la vida, para abatir las experiencia nefastas y devastadoras que él asentamiento y expansión del narcotráfico hicieron padecer a países como Colombia y México entre otros.
La experiencia citada en el párrafo anterior insta al Estado a adoptar una Política Integral contra el trafico, elaboración y consumo de droga que se torna imprescindible si apreciamos como se indica en la editorial del diario La Nación On Line del 25/08/2014 que "Entre 2001 y 2012, la Argentina fue el tercer proveedor mundial de cocaína, detrás de Brasil y Colombia. El 12,3% de los estudiantes consumió alguna droga ilícita en el último año. La marihuana (10,3%) es la de mayor prevalencia, seguida por la cocaína (2,7%). La edad de inicio en el consumo de psicofármacos, solventes o sustancias inhalables y paco se encuentra en los 14 años. Entre el 15% y el 27% de los estudiantes consumen en forma habitual alguna sustancia. Un 46,3% de los encuestados declaró que durante la comisión del delito se encontraba bajo el efecto de drogas ilícitas.".
En suma el problema del narcotráfico y consumo de drogas se ha instalado con fuerza inusitada en nuestro país, apareciendo inadmisible seguir obviándolo o actuar ocasionalmente sobre hechos circunstanciales, ya que la magnitud que ha asumido el fenómeno y la gravedad de sus secuelas tornan imprescindible la inmediata adopción de una Política Integral contra este drama que se incrementa con una celeridad que asusta, que es la esencia de la inseguridad de cada día, que se lleva puesto sin límites ni piedad el presente y el futuro de nuestros jóvenes, que convierte a Argentina en un país marginado en el concierto de las naciones. |