En julio del 2014 el diario Río Negro publicó una carta del suscripto titulada "El default y sus consecuencias" relacionada - obviamente - con las secuelas generadas por la negativa al pago de la sentencia dictada por el juez Griessa que generó la quiebra del país y como señalaba en dicha misiva los efectos consecuentes esto es " El default provoca efectos devastadores para la nación que lo declara, señalándose entre ellos el embargo de depósitos en cuentas bancarias y bienes del deudor, exclusión del mercado de capitales, lo que implica la imposibilidad de acceder a préstamos internacionales y ser marginado del comercio con el mundo al perder la financiación externa.".

Así ocurrió y ello nos llevó a devastadoras penurias que hoy pueden estar a punto de cesar a raíz de acuerdo llegado por Argentina con los llamados fondos buitres pero que está condicionado a la derogación de las leyes Cerrojo y de Pago Soberano y la aprobación también por el Congreso del acuerdo pactado tal como lo destaca el mismo diario del 1/03/16 en su edición on line donde se señala "Para que el acuerdo se concrete, la Argentina deberá cumplir con los requisitos impuestos por el juez Thomas Griesa. En primer lugar, el acuerdo debe ser aprobado por el Congreso argentino. Además, se deberán derogar la Ley Cerrojo y la Ley de Pago Soberano, que impedía pagarle a bonistas que no habían entrado a los canjes de 2005 y 2010. "Luego, la Argentina contempla ir en búsqueda del capital en los mercados financieros globales, y será usado para realizar los pagos", continuó Pollack". (Ver diario Río Negro On line de la fecha indicado bajo el título "Se cerró el acuerdo con los fondos buitre y la Argentina vuelve a los mercados internacionales")

Si bien el acuerdo logrado es sustancial para que Argentina vuelva al mundo, consiga créditos, se hagan inversiones en obras que generen empleo y de esa manera volvamos a ser un país normal lograr que ello se consiga en la Legislatura no es tarea fácil en tanto el gobierno requiere de votos de otros partidos para alcanzar la meta que nos permita despegar y no será cuestión fácil por la manifiesta oposición de los diputados de la Campora que ya han anunciado que se pronunciarán por la negativa como también lo ha hecho la Izquierda y la mayoría de legisladores del Frente para la Victoria.

Como ha ocurrido varias veces en este desafortunado país las consignas de la ruina como "Patria o Buitres" valen más que la razón evidente de escapar de esta trampa que nos genera la deuda en cuestión, llegar a un acuerdo razonable y con el volver a ser como Nación.

Justamente este quiere ser un mensaje dirigido a los representantes del pueblo para que venciendo barreras ideológicas acudan al espíritu de grandeza que pone por encima de cualquier objeción el bienestar general del pueblo que hoy tiene una oportunidad que tal vez sea irrepetible: reencontrarse con el crédito, el trabajo, la producción y en definitiva la unión nacional más allá de cualquier relato mentiroso.