En el día de ayer (07-08-2020) se difundió la noticia según la cual por primera vez desde los últimos años la inseguridad desplazó a los alimentos en la escala de preocupaciones de los argentinos.

Lo expuesto en el párrafo anterior no reviste absoluta certeza ya que la seguridad esto es el combate a las entraderas, asaltos, homicidios, violaciones y abusos de todo tipo que generan intenso miedo en la población ésta vigente al tope de la escala de los acontecimientos preocupantes en los habitantes de cada rincón del país fundamentalmente en el AMBA y la provincia de Buenos Aires desde hace largo tiempo.

Así reitero que ya en el 2014 en un artículo titulado “Cuando el crimen se hace costumbre” destaqué la notoria inquietud de los argentinos por la brutal vigencia de la inseguridad en la vida de todos los días

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Circunstancia que demuestra que los gobernantes no se han detenido a apreciar y resolver  el temor del pueblo por no poder conseguir andar, transitar, vivir sin adoptar todo tipo de medidas (alarmas, rejas, seguridad privada, cámaras de vigilancia, etc) para obtener esa paz que gozabamos en épocas en que ninguna grieta interfería en la convivencia cotidiana.

La violencia fue escalando desde ese tiempo remoto hasta alcanzar el nivel que hoy ostenta este país peligroso y paulatinamente y sin trabas de las autoridades que omiten actuar con la eficiencia que corresponde y le es impuesta por la Constitución Nacional y las leyes.