Leoncio Bermúdez era un joven policía que siendo las 21 hs del 14/11/23 se encontraba haciendo guardia en un hospital ubicado en pleno centro de la ciudad de Rosario cuando cuatro individuos armados y encapuchados ingresan al nosocomio sin mediar palabra se enfrentan con el agente de seguridad y lo asesinan de dos balazos en la cabeza y el rostro sin que pudiera sacar el arma reglamentaria para defenderse, sólo dos disparos casi sin mirar a la víctima y en un instante un valiente de 22 años perdió la vida.

El suscripto momentos antes había leído que en Rosario en el transcurso del año habían ocurrido 228 homicidios batiendo ampliamente cualquier récord en la materia convirtiéndose la bella ciudad del Monumento a la Bandera en el reino de la muerte, el sitio donde la vida no vale nada.

Así quienes resulten elegidos en las elecciones del próximo domingo deben priorizar la seguridad entre la multitud de problemas a resolver considerando que el flagelo de los asesinatos está presente a cada momento en cualquier lugar del país, y ha sido una de las principales causas del éxodo incesante de familias enteras que huyen al extranjero buscando la paz, que no encuentran en su patria.